La invitacion era rosa, con flores en las esquinas.
Bienvenidos sean, decia la parte superior. Hay un futuro marido, y no es Manolito.
El es empresario, millonario, pero tiene una gran secretaria, el nunca escribió bien.
A la boda irá Miguelito, Miguel ahora, un gran señor.
Sigue con esos pelos rubios alocados, sigue excitado con la vida, sigue con esa dignidad de soldado.
Mafalda es doctora, Guille adolescente.
Ha curado el cancer, ha espantado al SIDA, Africa ya no tiene tanta hambre,
Guille la admira.
El es un adolescente alocado, de vaqueros rotos, de corazon alborotado,
aprendió del amor de un viejo globo terraqueo, sabe de la vida por las noticias que oia de musica de fondo mientras jugaba con Burocracia.
Felipe no fue vaquero, ni astronauta, pero anda de botas de cowboy.
Aun no le dice a esa niña que la quiere, pero es feliz en el mundo real, aunque en las noches huya al suyo, al personal, donde se van los sueños y se hacen realidad.
Y yo como se todo esto? Porque yo me casé con Libertad.
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