Hay un deseo que pido siempre que pasa un tren..

Vámonos, tu y yo, de aventura.
Nos subimos en la combi
tu de pilota
porque el viento le pega mejor a tu cabello
y mete primera..
Llevo el itrip
y mi ipod morado ( esa funda que odia Alana )
Pasamos a despedirnos del mar
aunque se huele sin verlo,
después

solo manejamos

hasta que los paisajes que vemos
coincidan con los que imaginamos.
Comemos en el auto
y cantamos hasta necesitar el silencio.
Podemos conocernos más
rayar en los mapas
perdernos
enredarnos.
Tu a veces bostezas pero no cedes el volante,
y te ves tan bien que me quitas las ganas de manejar.

Cuando manejo yo te burlas
mis piernas son flacas y a veces tiemblan
al cambiar de velocidad.
De noche bajamos las ventanas completamente
y manejamos hasta que no oímos nada más
que el viento, contamos luciérnagas
que se pierden con las luces de los otros coches.

No sabemos cuando vamos a llegar
a un lugar que no pensamos encontrar.
Pero por mientras, que siga la música,
las ruedas girando,
y esa van estacionada siempre en el mismo lugar
para verla y seguirme acordando de ti.